REHOUSE. Acelerar el ritmo de renovación de edificios en la UE

REHOUSE. Acelerar el ritmo de renovación de edificios en la UE

En un mundo en el que la sostenibilidad ocupa un lugar cada vez más destacado entre nuestras preocupaciones, la necesidad de soluciones innovadoras para transformar nuestro entorno construido es más acuciante que nunca. El estado actual del parque edificatorio de la UE supone un reto importante, actuando como uno de los mayores consumidores de energía de Europa y responsable de más de un tercio de las emisiones de la UE.

Reconociendo la urgencia de la situación, la Comisión Europea desvela una nueva estrategia en octubre de 2020: «Una ola de renovación para Europa: edificios más verdes, crear empleo y mejorar vidas» Esta estrategia representa un paso adelante crucial, con el objetivo de incentivar las inversiones en renovación y apoyar la implementación de métodos y tecnologías eficientes.

A pesar de estos esfuerzos, la realidad sigue siendo cruda – más del 75% del parque inmobiliario de la Unión Europea no es eficiente energéticamente, y el índice anual de renovación languidece en un mero 1%. La estrategia enfatiza en la necesidad de renovaciones profundas, es decir, que reduzcan el consumo de energía en más de un 60%. ¿El objetivo general? Duplicar los índices anuales de renovación energética en la próxima década, no sólo para reducir las emisiones, sino para mejorar la calidad de vida de los residentes y crear empleos ecológicos en el sector de la construcción.

Para alcanzar la profundidad y volumen de renovación necesarios, es esencial contar con un sector de la construcción fuerte y competitivo. Adoptar la innovación y sostenibilidad es primordial para incrementar la calidad y reducir los costes de producción e instalación. El partenariado europeo Built4People destaca tres pilares cruciales para este empeño:

  1. Soluciones tecnológicas industrializadas: Adopción de tecnologías avanzadas para optimizar los procesos de construcción.
  1. Digitalización del sector de la construcción: Aprovechando herramientas digitales como el Building Information Modelling (BIM) para mejorar la transparencia y eficiencia.
  1. Integración de los principios de circularidad: Incorporación de principios de economía circular en toda la cadena de valor, desde el aprovisionamiento de materiales hasta la gestión de residuos.

En medio de esta necesidad apremiante de innovación en materia de renovación, REHOUSE emerge como un faro de esperanza. Coordinado por CARTIF y en el marco del programa Horizonte Europa, REHOUSE está preparado para liderar la innovación en el sector de la construcción. Con un enfoque centrado en las renovaciones profundas y los principios de circularidad, REHOUSE tiene como objetivo desarrollar y demostrar ocho paquetes de renovación que incorporan innovaciones tecnológicas prometedoras hasta TRL 7 (sistema piloto integrado demostrado).

Estos paquetes de renovación están meticulosamente diseñados para superar las principales barreras que impiden mejorar los actuales ratios de renovación de la UE. A través de la integración de elementos activos/pasivos, la prefabricación y la construcción fuera de obra, REHOUSE busca ofrecer soluciones de renovación asequibles y sostenibles con la flexibilidad necesaria para abordar casi el 100% de los retos de renovación de edificios a nivel de la UE.

Pero lo que realmente distingue a REHOUSE es su enfoque centrado en las personas. Al implicar activamente a los residentes y propietarios de edificios durante el proceso de renovación, el proyecto asegura que las soluciones no solo sean sostenibles, sino también asequibles, satisfactorias y atractivas.

REHOUSE está ahora en su ecuador, demostrando notables avances y logros. El proyecto ya ha establecido las bases para de la estrategia de innovación social, ha detallado las especificaciones de las soluciones innovadoras, y ha elaborado versiones digitales de los paquetes de renovación. Además, se ha completado un marco de evaluación innovador y un diagnóstico técnico de los edificios de demostración. La validación de los paquetes de renovación (RP) está en marcha para alcanzar el TRL6 (sistema prototipo verificado), acompañada del desarrollo de directrices para su industrialización. Además, el proyecto está definiendo activamente las especificaciones del Libro de Registro Digital de Edificios, diseñando y preparando los cimientos para la posterior construcción de los sitios de demostración, y definiendo el camino hacia la consecución del mercado una vez concluido el proyecto. Estos esfuerzos marcan el comienzo del camino para revolucionar los procesos de renovación, impulsados por la innovación y la colaboración.

Únete a nosotros en este viaje transformador para allanar el camino hacia un mañana más verde y brillante con REHOUSE. Juntos podemos remodelar nuestro entorno construido, crear espacios sostenibles y preservar nuestro planeta para las generaciones venideras.


Este proyecto ha recibido financiación del programa de investigación e innovación Horizonte Europa de la Unión Europea bajo el acuerdo No 101079951.

Eficiencia energética y centros comerciales

Eficiencia energética y centros comerciales

Los centros comerciales se inventaron en Estados Unidos en los años 20 del siglo pasado y son la versión moderna de los mercados históricos, integrando un conjunto de tiendas independientes, diferentes servicios y zonas de aparcamiento.

A lo largo de Europa podemos encontrarnos miles de espacios comerciales (representan casi un 30% del stock de edificios no residenciales) variando, entre otros criterios, sus funciones, tipologías, formas y tamaños. Actualmente, hay más de 6 millones de empresas representadas dentro de este sector, y alrededor de 30 millones de ciudadanos europeos que trabajan en el sector comercio.

Cada día aparecen nuevos centros comerciales para cubrir las necesidades tanto de los clientes como de los comerciantes. Pero estos nuevos centros no remplazan a los anteriores formatos, sino que se suman a las tiendas y comercios ya existentes.

Según el Consejo Internacional de Centros Comerciales (ICSC), un centro comercial es “un conjunto de unidades y áreas comunes, con una superficie bruta mínima de 5.000 m2 y que está planeado, construido y administrado como una única entidad.”

Los centros comerciales son percibidos, en muchos casos, como iconos de la sociedad de consumo, debido principalmente a su alta demanda energética, sus altas emisiones de CO2 y alta generación de residuos, por lo que es necesario acercar su configuración y funcionamiento a criterios de sostenibilidad para poder ayudar a lograr los objetivos marcados por Europa en términos de consumo energético y emisiones. Se puede decir, en términos generales, que los centros comerciales, debido a sus grandes demandas energéticas, tienen un gran potencial de ahorro energético, así como de reducción de emisiones, además de tener una gran influencia en las tendencias de moda y el estilo de vida de los clientes.

Mientras que en el sector residencial la energía consumida se usa principalmente para calefacción, agua caliente sanitaria y diferentes aparatos electrónicos, en los centros comerciales el consumo de energía proviene de una gran variedad de fuentes entre los que se encuentran la iluminación, ventilación, climatización, refrigeración para la conservación de alimentos y otros usos dependiendo de los servicios ofertados. Esta composición de consumo energético puede variar mucho de unos centros a otros dependiendo de los usos previamente indicados. Por ejemplo, la existencia o no de supermercados en su interior condiciona mucho el consumo relativo a la refrigeración para la conservación de los alimentos. Otro ejemplo claro son las tiendas de electrónica, donde el consumo debido a aparatos electrónicos es bastante superior al de otro tipo de tiendas que son más dependientes de la iluminación como tiendas de ropa o muebles.

La mayoría de los centros comerciales ya construidos tienen un gran potencial de ahorro energético, ofreciendo la posibilidad de mejorar en aspectos como iluminación, ventilación, mejoras en la envolvente, inclusión de sistema de gestión y control, etc. Sin embargo, hay unas barreras identificadas para alcanzar estos objetivos de reducción energética y no todo puede ser resuelto simplemente con la instalación de nuevas soluciones técnicas. Satisfacer a los clientes es la primera premisa en un centro comercial y los clientes no demandan de forma directa una reducción energética, sino variedad de productos y precios bajos, acceso mediante transporte público, parking y buena ubicación.  Afortunadamente, la conciencia ambiental está abriéndose paso poco a poco, lo que es un factor muy importante para contar con la aprobación de las acciones asociadas a la eficiencia energética por parte de los clientes y de esta manera ser un factor positivo más a la hora de elegir dónde hacer las compras.

Actualmente existen una gran variedad de tecnologías convencionales e innovadoras y sistemas de control y gestión energética, con los que poder renovar los centros comerciales desde un punto de vista energético. Gracias a este tipo de actuaciones, se puede satisfacer la demanda energética de los centros comerciales con un menor consumo energético, a la par que se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero. En CARTIF estamos trabajando en proyectos encaminados a la mejora de la eficiencia energética en edificios, entre los que se encuentran centros comerciales (proyecto CommONEnergy), edificios públicos (proyecto BRICKER) y residenciales y del sector terciario (proyecto INSPIRE).

A través de herramientas de modelado y simulación energética, auditorías energéticas, estrategias avanzadas de instrumentación y control, análisis y estudios detallados en la incorporación de energías renovables, y nuestra experiencia de más de 15 años, somos capaces de reducir los costes económicos y medioambientales de la generación energética.

La tecnología, por tanto, ya está disponible para quien quiera aplicarla. Ahora solo es necesaria una mayor conciencia ambiental para hacer uso de sus ventajas.